viernes, 26 de diciembre de 2008

para tí.

Querido hijo.

Tenerte entre nosotros esta Navidad es un hermoso regalo de la vida, tu presencia nos hace sentir que tenemos mucho que agradecer. Al verte nos das la oportunidad de abrazarte, escuchar tu voz y sentir tu calidez.

Te amamos por ser parte nuestra, por habernos dado la dicha de tomarte en brazos y sentirnos padres por primera vez, por enseñarnos con tu niñez sonriente y curiosa cómo ser mejores seres humanos. Te queremos y querremos siempre, ya lo sabes; pero queremos repetirlo hoy. Recuerda que eres un gran ejemplo para tus hermanos por tu esfuerzo y audacia. No tomes esto como una carga sino como un privilegio.

En la forma en que iniciaste tu propio camino fuera de casa nos vemos reflejados y pensamos que igual les hicimos falta a nuestros padres y ellos a nosotros dos. Por ello valoramos tanto los momentos vividos al regresar a casa.

A donde vayas, honra tus raíces, actúa con tus valores, vive tus sueños, controla tus impulsos, da lo que puedas, ríe cuando así lo sientas, vive cada momento alegre, pero sobre todo, sé feliz que para éso naciste.

Con todo nuestro amor,

Papá y Mamá.

Navidad 2008

3 comentarios:

Luis Escalante dijo...

Hermosas palabras.

Es realmente un privilegio.

¿Naciste en DF?

luisescalante@email.com

Ritz dijo...

Creo que no me pudo haber tocado mejor regalo de Navidad.

Nací aquí, pero no me tocó vivir en el DF sino hasta 21 años después.

tatirijillo@gmail.com

greenlips dijo...

me caen increible tus papas.. el ultimo parrafo es totalmente sabio.

Salut!